El servicio de Google Translate es sumamente útil: gratis y rápido, engloba la traducción instantánea automatizada a más de 100 idiomas. Mediante Google, la app o el plugin en páginas web, podemos hacernos una idea de qué dice cualquier página web o texto online.
Muchos webmaster y personas que tienen una tienda online, optan por usar Google Translate para páginas web como método de llegar a más usuarios internacionales y abrir las posibilidades de venta al mundo.
Inmensamente popular, Google Translate traduce unos 100 mil millones de palabras al día, es accesible y fácil de usar, funciona en móvil y resuelva un sinfín de dudas lingüísticas al instante.
Sin embargo, las traducciones que ofrece Google Translate distan mucho de ser perfectas. Si lo dudas, métete en cualquier página con bastante texto, un periódico por ejemplo, en un idioma bastante distinto al tuyo (ruso, hebreo, chino, tagalo, etc.) y usa Google Translate para ponerlo en castellano. Verás que no es una traducción profesional como esperarías cuando lees una página oficial o un copy profesional.
Por esto hay que tener mucho cuidado a la hora de optar por Google Translate como “traductor” oficial de tu página web. Google Translate es apto para traducciones rápidas, sobre todo cuando se trata de contenido que no se utiliza para representar a tu empresa o información de la cual tus clientes dependen para informarse o tomar decisiones. Si es información generalista que no tiene gran importancia en cuanto a la imágen empresarial o tus clientes, Google Translate es una solución aceptable– sobre todo por tratarse de una situación en la cual la gramática y la exactitud no son factores clave.
Google Translate es ideal cuando quieres dar o tener una noción sobre texto, pero si necesitas quedar bien, claro y profesional delante de tus clientes, usuarios u otras empresas, no es una solución recomendable. En el caso de una tienda online por ejemplo, es mejor emplear la traducción humana– después de todo, tu imagen y la fiabilidad de tu negocio están en juego: si entro en tu página y veo que todo lo que aparece en mi idioma está mal escrito o no está claro, desde luego me llevaré una mala impresión y lo más probable es que no compre.
Un traductor humano es capaz de entender y representar el contexto del contenido, y también localizarlo a una zona geográfica determinada. Esto es muy importante si quieres conectar con un público determinado y asegurar que 1) entiende lo que ofreces 2) que tu página parezca fiable y profesional.
Muchos clientes se quejan de los costes de una traducción humana– generalmente, recomendamos que apuesten primero por los mercados más importantes, y que después hagan traducciones a otros idiomas. Piensa siempre en las veces que has entrado en una página con una mala traducción, lo más probable es que te fueras sin comprar. Por tanto, es mejor una expansión gradual pero profesional, en lugar de una traducción automática con Google Translate a todos los idiomas si quieres ganar clientes que repiten.
Dado que la traducción humana lleva sus costes, puedes también empezar con un par de idiomas que sean más estratégicos y utilizar Google Translate para los que sean menos importantes (si no tienes clientes en Azerbaiyán, probablemente puedes quedarte con la traducción automatizada). Mediante Google Analytics puedes determinar de qué países vienen la mayoría de tus visitas y claro, también tu historial de ventas.
Recuerda también que la traducción humana lleva su tiempo– tendrás que dejar tiempo suficiente para el proyecto, no esperes tener todas tus páginas de la web traducidas en un par de días.
Si quieres ver cómo All Around te puede ayudar con la expansión internacional online, contáctanos.
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